Las burgers son lo de hoy

En la vida hay amores que duran para siempre, y las hamburguesas son uno de esos que inevitablemente nos hacen felices. Porque barriga llena, corazón contento.

 

 

Amor a las hamburguesas

 

No saben el gusto que me da escribir el título de la columna de este mes. No solo porque es la columna de inicio en una nueva casa editorial para Burgerman, sino porque es totalmente cierta. Arranca en este diciembre un espacio donde hablaremos, admiraremos, reseñaremos y básicamente, adoraremos a esa maravilla culinaria y experiencia de vida que sucede cuando un disco de carne molida se posiciona entre la tapa y la base de un bollo. Eso es, básicamente, una hamburguesa.

 

via GIPHY

 

Quizás puede llevar una porción de queso, tal vez tocino o lechuga y jitomate. Pero el platillo más socorrido, popular y enormemente consumido en el mundo pre, durante y post pandemia es nuestra querida hamburguesa.

 

Expresión gastronómica del mundo online

 

Pareciera que el mundo conspira para que este pequeño platillo, desdeñado por los grandes chefs y la alta cocina, se haya vuelto, gracias al mundo del internet (de Instagram, sobre todo), en un platillo aglutinador de culturas. Si el mundo online tiene su propio lenguaje y su propia cultura, las hamburguesas son, entonces, su expresión gastronómica por antonomasia.

 

Hay algo del mundo digital que quiere ser como la globalización de la cultura homogénea. Es decir, el mundo online es como una misma cultura a cada rincón del planeta (dentro y fuera de las pantallas) y por ende, el platillo más típico de nuestro vecino del norte ha sido transportado a todo aquel rinconcito del planeta donde hay una cucharadita de internet.

 

via GIPHY

 

El fenómeno de la enorme popularidad de la hamburguesa no es solo de México. Las hay en China, Australia, Dinamarca, Chile, Sudáfrica; basta con decir que el chef número uno del mundo, René Redzepi, abrió un burger joint el año pasado.

 

En todos lados el torbellino de la carne molida entre dos panes arrasa. ¿Por qué? Porque la simpleza de su concepción hace que sea fácilmente transportable a casi cualquier tipo de cocina. Porque la Verdad —sí, con mayúscula—, puede estar entre dos panes y dentro de un disco de carne molida. Pero, básicamente, porque es deliciosa.

 

¡Qué comience la degustación!

 

Sí, la burger ha sido, desde que tengo uso de razón, mi delirio y mi comida preferida. Por eso me dedico a tratar de probarlas todas. En este mundo con tantas opciones, es un trabajo sucio, pero con gusto me ofrezco a hacerlo.

 

Bienvenidos todos a partir de esta edición a un espacio de delicias donde hablaremos de lo mejor que hay recientemente en el mercado mexicano y las tendencias en la burguerósfera.