Imagen cortesía de Rock Action / Temporary Residence Ltd, fotografía por Antony Crook​​

El mundo rumbo a Mogwai

El inesperado éxito del álbum de la banda escosesa Mogwai, “As the Love Continues”, el cual alcanzó el número 1 en los charts ingleses, levanta algunas preguntas en las cuales ahondamos.

 

Texto por Paul Dalgarno

 

Una Gran Bretaña renovada

 

Una de dos, o Mogwai se ha movido más cerca del mundo o el mundo se ha acercado más a Mogwai. Su álbum debut “Mogwai Young Team” de 1997 alcanzó el número 75 en las listas musicales de Gran Bretaña, justo unos meses después de que Tony Blair tomará el poder con su nueva masculinidad, su nueva meritocracia y su nuevo todo, con un nuevo equipo inglés con brillo, descaro y confianza preguerra de Irak, con géneros como Britpop y Cool Britannia, dentro de los que “Be here now” de Oasis y “Spiceworld” de las Spice girls eran los álbumes más vendidos ese año en la Gran Bretaña.

 

El final del conservadurismo

 

Pero 1997 también le puso la tapa del ataúd a 18 años de enervante gobierno conservador, años en los que la ciudad natal de Mogwai, Glasgow, había sido gestionada por el gobierno inglés hacia un declive administrativo, con su industria destruida y con la esperanza de vida más baja en el Reino Unido y Europa.

 

Diferentes en todo sentido

 

El ADN de Mogwai difiere de muchas bandas de post-rock con las que se les comparaba inicialmente, incluyendo Sigur Rós y Godspeed You! Black Emperor.

 

Ellos fueron y son más una banda de rock alternativo que toca casi siempre sin un vocalista, dado que pocas canciones de Mogwai tienen voces.

 

Su dinámica entre el silencio y el estruendo es una autentica forma de arte. Su música tiene ira, descaro, contemplación y, en la mayoría de los casos, de manera auténtica y ganada a pulso, euforia.

 

Éxito en todas direcciones

 

Además de sus cada vez más exitosos álbumes de estudio “Rave Tapes”  de 2014 y “Every Country’s Sun” de 2017, los cuales alcanzaron el Top 10 de las listas inglesas, el último cuarto de siglo se le ha visto a la banda grabar bandas sonoras para la película Kin (2018) y series de TV como Les Revenants (2012-2015) y los documentales Zidane: A 21st Century Portrait (2006), Atomic y Living in Dread and Promise (2015).

 

Así como los álbumes en vivo y las apariciones en festivales atestiguan su maestría musical, el atractivo internacional va más allá de las paredes del estudio.

 

Música llena de tristeza

 

Lo que carecen en desmadre en el escenario es compensado con una maravilla auditiva en guitarras, batería, electrónicos entremezclados en crecientes y abrumadoras notas con sonidos tan delicados y feroces, que es difícil rastrearlos hasta el amplificador que los genera.

 

“As the love Continues” es profundo, oscuro y cohesivo, desde su cálidas notas de bajo hasta sus picos infusionados de electrónica. Como lo dijo Pitchfork: “estas son canciones montañosas sin nombre y llenas de tristeza”. Un nuevo rango, pero no una nueva dirección.

 

En entrevista con The Guardian, Stuart Braithwaite describió el éxito del álbum como “totalmente surreal e inesperado. En ningún momento, ninguna de las personas que trabajan con nosotros nos ha dicho que vamos a tener un álbum número uno —no es el tipo de idea que entra en nuestra órbita—”.

 

Hasta ahora, claro.  Mientras el mundo se ocupa de una crisis de salud, las economías caen y el optimismo político y social también, para decirlo de manera discreta, todos hemos entrado a la órbita de Mogwai y ellos a la de nosotros.